jueves, 5 de febrero de 2015

¿Por qué las botellas de vino son de 750 mililitros?

Seáis amantes o no del vino seguro que alguna vez os habéis planteado por qué el tamaño de la botella más comercializado de la bebida de Baco tiene las medidas de 750 milímetros. ¿Por qué no son de un litro o de medio litro? A continuación, vamos a ver diferentes versiones que intentan justificar la capacidad de la botella.
Botella de Lunático de 750 mililitros
Según estudios arqueológicos los romanos no usaban  vidrio como envase. Sin embargo, los seguidores del César utilizaban entre otras muchas medidas de volumen el acetabalum. Y es que un acetabalum romano redondea los 700 ml, que, dicho sea de paso, era una ración diaria de consumo de vino. No os asustéis por la cantidad de vino que bebían los romanos ya que ese vino se tomaba diluido, como era costumbre en la época.
Otra versión más "romántica" sobre el uso de la botella de 750 mililitros tiene mucho que ver con el gremio de los vidrieros y sobre la capacidad humana. Y es que el vidrio, hasta su industrialización en el siglo XVII, fue tarea de artesanos. Hacer una botella con calidad y buen material era un trabajo preciso que realizaban sopladores profesionales. Según varios estudios, el volumen promedio que puede desalojar el pulmón humano, mientras realiza esta tarea en forma sostenida, va de los 700 a los 800 ml de aire, de forma que los recipientes que se construían con cierta velocidad, tenía que forzosamente alcanzar esos volúmenes.
 
Soplador de vidrio
También hay quien habla que la medida de la botella de 750 mililitros viene dado debido a que para hacer esa cantidad de vino se necesita un kilo de uva.

No obstante, el por qué de la medida de la botella lo encontramos, como todo lo que incumbe pesos y medidas, en un problema de estandarización del comercio internacional y de cómo los estados cobraban impuestos aduaneros. Los países anglosajones usaban un sistema de onzas y fracciones; franceses y alemanes, el métrico decimal de litros; y al momento de tasar, hacía falta una tabla para cada bebida según su origen porque los envases no coincidían.

Para evitar este descuadre las botellas más usadas iban de 700 a 800ml, con abundantes modelos de 730ml. Estos tamaños son aproximaciones al “quinto de galón”, que era la medida más usada en el sistema inglés, cuna de la botella industrial de vidrio.

Años después los países industriales de Europa, a los que luego se sumarían Estados Unidos y Canadá, primero y luego el resto del mundo, establecieron en la década de 1970 que el formato universal de envasado del vino sería 750ml. Con el paso de los años esta medida se ha establecido como la medida óptima que puede consumir una pareja.



Tamaño botellas
Antes de terminar este post decir que además de la botella de 750 mililitros podemos encontrar una gran variedad de tamaños de botellas, como la de 370 mililitros (la mitad de una botella estándar), o la Magnum, equivalente a 2 botellas (1, 5 litros). En línea ascendente la seguiría la Jeroboam, de capacidad de cuatro botellas stándar (3 litros). Después, la Rehoboam con un volumen idéntico al de 6 botellas estándar (4,5 litros). y detrás la Mathusalem (6 litros, 8 botellas), la Salmanazar (9 litros, 12 botellas), la Baltasar (12 litros, 16 botellas), la Nabucodonosor (15 litros, 20 botellas), la Solomón (20 litros, 28 botellas) y la Primat (27 litros, 36 botellas). Cómo podéis ver la mayoría de estas botellas tienen nombres de personajes que aparecen en la Biblia, pero esto será motivo de otro post...